492
Panorama Actual del Medicamento
REVISIÓN
cientes con ELA afectados por neumonía. También
se consideran útiles los dispositivos humidificadores
ambientales.
Labilidad emocional
La presencia de signos de labilidad emocional
puede llegar a afectar a más de la mitad de los
pacientes con ELA, incluso en ausencia de sínto-
mas motores. Hay datos clínicos que demuestran
la eficacia en el tratamiento de estos síntomas
con antidepresivos tricíclicos (
amitriptilina
) y
con inhibidores de la recaptación de la seroto-
nina (
citalopram
,
fluvoxamina
). Salvo la mejor
tolerancia de estos últimos por tener menos efec-
tos secundarios, no parece haber ninguna ventaja
para una medicación. Hay estudios controlados
que han demostrado la eficacia en esta indica-
ción de la combinación a dosis de fijas de
dex-
trometorfano
y
quinidina
, no comercializada
aún en España aunque ha recibido recientemente
el informe favorable de la Agencia Europea de
Medicamentos (EMA) para su autorización en la
Unión Europea.
Calambres
En fases avanzadas de la enfermedad un ele-
vado porcentaje (hasta el 75%) de los pacientes
puede experimentar dolor provocado por calam-
bres, que aparecen generalmente antes de dor-
mir y pueden llegar a ser muy molestos. Pueden
ser aliviados mediante estiramientos y movimien-
tos pasivos de las articulaciones, así por masajes,
manteniendo el músculo afectado caliente y es-
tirándolo hasta que el dolor se alivie. Una revi-
sión sistemática de los medicamentos utilizados
para tratar los calambres en pacientes con ELA
(
Baldinger, 2012
), no ha encontrado ninguna evi-
dencia sólida en la que pueda apoyarse el uso de
baclofeno, vitamina E, riluzol, treonina, indinavir
y memantina para esta finalidad. Por el contra-
rio, un pequeño estudio abierto (
Bedlack, 2009
)
sugiere que el
levetiracetam
podría ser benefi-
cioso, por lo que puede ser recomendable en esta
indicación cuando las maniobras de fisioterapia
no resulten útiles.
Espasticidad
La
fisioterapia
es el mejor tratamiento para en-
frentarse a la espasticidad en la ELA. Cuando no se
obtenga una respuesta efectiva, suele recurrirse a
los fármacos habitualmente utilizados en espastici-
dad, aunque el tratamiento farmacológico deberá
hacerse de forma lentamente progresiva para evitar
el empeoramiento de otros síntomas como la disfa-
gia o la función ventilatoria. El fármaco de referen-
cia es el
baclofeno
oral (dosis creciente a partir de
5 mg/8 h), aunque en administración intratecal es
más eficaz en términos de control del dolor y de la
calidad de vida de los pacientes, por lo que es prefe-
rida esta vía en cuadros refractarios de espasticidad.
Como alternativa al baclofeno oral también se han
utilizado
tizanidina
(6-24 mg/día),
gabapentina
(900-2.400 mg/día),
memantina
(60 mg/día),
te-
trazepam
(100-200 mg/día) y
diazepam
(10-30
mg), aunque no se han estudiado específicamente
en pacientes con ELA.
Depresión
Dado el carácter progresivo y el pronóstico de
la enfermedad, es previsible que la sintomatolo-
gía depresiva o ansiosa sea frecuente a lo largo
de la evolución y de hecho, se produce en todas
las etapas de la ELA. No menos importante es la
que puede afectar a los propios cuidadores del
paciente, especialmente cuando se trata de fa-
miliares y allegados, lo que ha recomendable el
tratamiento farmacológico con antidepresivos y/o
ansiolíticos. Como antidepresivo, la
mirtazapina
puede ser mejor tolerada en las fases más avanza-
das de la ELA que la amitriptilina y los inhibidores
de la recaptación de serotonina (ISRS: fluoxetina,
paroxetina, escitalopram, citalopram), aunque
debe valorarse si algunos de los efectos colate-
rales de estos últimos puede resultar útiles en el
control de otros signos y síntomas de la ELA, como
la sialorrea (atendiendo al efecto anticolinérgico
de la amitriptilina). Por su parte, los ISRS puede
ser preferibles en pacientes ancianos o con alte-
raciones cognitivas. En el caso de que el síntomas
preponderante sea la ansiedad, puede recurrirse al
bupropion
o a una
benzodiazepina
.
Alteraciones del sueño
El insomnio es frecuente (30-50%) en los pacien-
tes con ELA, especialmente durante la última fase
de la enfermedad. Genera un considerable malestar
y empeora el cansancio y la debilidad. Como trata-
miento sintomático en pacientes con ELA, se han
obtenido buenas respuestas con
amitriptilina
y con