491
Panorama Actual del Medicamento
REVISIÓN
sayos en fase preclínica y con modelos de experi-
mentación animal, en el que se han estudiado la
utilización de genes que expresan factores neu-
tróficos humanos utilizando agentes transfectores
virales o de la SOD-1, con resultados alentadores.
Asimismo, la técnica del silenciamiento génico o
del RNa de interferencia (RNai) se ha aplicado en
modelos experimentales de la enfermedad y es
una aproximación prometedora de un posible tra-
tamiento, en principio para las formas familiares
ligadas a mutaciones de la SOD-1, que podría ex-
tenderse a otras alteraciones genéticas conocidas.
Actualmente están en curso diversos ensayos clí-
nicos en la Unión Europea (
EU Clinical Trials Regis-
ter
) relativos al tratamiento de la ELA, incluyendo
a
masitinib
(un inhibidor de la tirosina cinasa que
actúa modulando la respuesta inflamatoria de los
mastocitos implicados en la neuroinflamación),
ozanezumab
(GSK 1223249, un anticuerpo mo-
noclonal que actúa sobre la proteína denominada
Neurite Outgrowth Inhibitor - Nogo-A -
que im-
pide el desarrollo neuronal desde las conexiones
neuromusculares),
TRO19622
(un fármaco de
estructura esteroídica con propiedades neuropro-
tectoras),
tirasemtiv
(CK-2017357, un activador
de la troponina muscular),
ONO 2506PO
(un aná-
logo del ácido valproico),
rasagilina
(
Azilect
®
, un
IMAO-B que reduce el metabolismo de la dopa-
mina, utilizado como agente antiparkinsoniano),
memantina
(
Axura
®
, Ebixa
®
;
un antagonista de
los receptores NMDA del ácido glutámico, utili-
zado actualmente en Alzheimer),
talampanel,
carbonato de litio
(antimaniaco)
, ácido tauro-
desoxicólico
y
ácido alfalipoico.
También están
siendo objeto actualmente de ensayos clínicos
– algunos en España – varios medicamentos de
terapia celular, basado en el empleo de
células
madre multipotentes
de origen osteomuscular
y mesenquimatoso. Asimismo, la FDA de Estados
Unidos ha autorizado recientemente la realización
de un ensayo clínico con
fingolimod
(
Gilenya
®
),
atendiendo a su capacidad para bloquear el paso
de algunas células del sistema inmune al cerebro
y a la médula espinal que potencialmente dañan a
las neurona motoras.
Tratamiento sintomático
y de las complicaciones
Sialorrea
El exceso de salivación en los pacientes con ELA
es debido al deficiente cierre de los labios, falta de
control postural de la cabeza y pérdida de la capa-
cidad autonómica de la deglución, así como al cie-
rre defectuoso del velo faríngeo y a alteraciones del
sistema vegetativo. Este signo puede facilitar el de-
sarrollo de estomatitis o de infecciones fúngicas en
la boca; además, resulta muy molesto y humillante
para el propio paciente, lo que refuerza la tendencia
al aislamiento social.
Es habitual recurrir a fármacos con efectos an-
ticolinérgicos y, en particular, a la
amitriptilina
, a
pesar de que no se dispone de estudios específicos
al respecto. Generalmente, suele ser suficiente con
dosis bajas (10 mg/8 h), aunque en ocasiones pue-
den requerirse dosis superiores (hasta 50 mg/8 h).
Algunos autores prefieren utilizar un anticolinérgico
puro, como la
atropina
en gotas al 0,5-1% para
administración sublingual (3-4 veces al día), debido
a la corta duración de su acción, lo que resulta espe-
cialmente conveniente para evitar una permanente
sequedad de boca. Aunque en España solo se dis-
pone de medicamentos comerciales con atropina
en forma de solución al 0,1 y 0,05%, la solución al
0,5% o 1% puede prepararse mediante formula-
ción magistral.
Cuando estos tratamientos pierden eficacia o son
insuficientes, puede utilizarse
toxina botulínica
en
infiltración en las glándulas salivares. Los resultados
son, en general, satisfactorios, con una duración de
los efectos beneficiosos de al menos dos meses y,
en general, el tratamiento se tolera bien. Una op-
ción cuando la farmacoterapia se torna ineficaz es
la
radioterapia selectiva
de las glándulas salivares,
que ha demostrado resultados muy satisfactorios. La
cirugía no está indicada en este caso.
Dificultad en la expectoración
En general, los pacientes con insuficiencia respi-
ratoria o bulbar suelen presentar dificultades para
llevar a cabo una limpieza adecuada del árbol respi-
ratorio; es decir, falla la expectoración y ello provoca
la acumulación de moco, lo que es un factor pro-
nóstico negativo, especialmente en pacientes con
ELA sometidos a ventilación mecánica no invasiva
(VMNI). Aunque se ha sugerido el empleo de fár-
macos mucolíticos como la
guaifenesina
o la
ace-
tilcisteína
, o broncodilatadores como el
bromuro
de ipratropio
o la
teofilina
, lo cierto es que no se
dispone de estudios clínicos controlados específicos.
En cuanto a los mucolíticos, solo se recomienda su
uso cuando el paciente sea capaz de toser adecua-
damente. El uso de dispositivos insufladores/exsu-
fladores puede resultar útil, particularmente en pa-