Página 21 - Revista Farmacéuticos - Nº 111 - Octubre/Diciembre 2012

Pde ReboticaLIEGOS 21
una influencia de
este tipo se da con el
personaje de Ripley
en la novelas de
Patricia Highsmith).
Puestos a escoger
solo una de las
novelas de
ChandlerMarlowe mi
elección recae en
The Long Goodbye (1953) (El largo adiós).
Un thriller
El carácter excitante y la creación de suspense se
dan en la inmensa mayoría de las novelas de
misterio, y de modo muy particular en las que se
centran en el entorno del espionaje, pero es
corriente reservar el término de thriller para
aquéllas en las que estas características se sitúan
por encima del posible descubrimiento del autor
de un asesinato. Es decir, aquí no domina la
incógnita sino la excitación y el suspense. En este
contexto cabría citar algunas novelas de Patricia
Highsmith, pero muchos estarán probablemente
de acuerdo en que el más destacado autor en este
género es Eric Ambler. A él debemos numerosas
narraciones extraordinarias, con un trasfondo
político y social innegable, pero cabe destacar
aquí The Mask of Dimitrios (1939) ( La máscara
de Dimitrios) obra que ocupa con razón un lugar
destacado en todas las antologías de novelas de
misterio.
Un relato de espías
Multitud de autores han escrito relatos centrados
en el espionaje, empezando con John Buchan y su
The Thirty-Nine Steps (1915) (Los treinta y nueve
escalones) pero no cabe discusión alguna acerca
de quién es el autor digno del máximo
reconocimiento: John Le Carré merece el trono.
Lo merece por varias de sus aportaciones, pero
muchos estarán de acuerdo en que una de sus
primeras obras, The Spy Who Came in from the
Cold (1963) ( El espía que surgió del frío) es la
más impactante y la que más invita a la reflexión.
Un asunto judicial
Existen muchas novelas de misterio centradas en
un ambiente judicial, y el término muchas
bastaría para referirse a los más de 80 casos de
Perry Mason, creado por Erle Stanley Gardner.
También aquí ocupa un lugar destacado Cyril
Hare, tanto por ser el seudónimo empleado por
un juez (Alfred AG Clark) como por el hecho de
que una de sus mejores novelas se titule
precisamente Tragedy at Law (1942). Con todo,
en esta selección debe aparecer de nuevo Agatha
Christie. Su Witness for
the Prosecution (Testigo
de cargo), un relato incluido en The Hound of
Death (1933) (Poirot infringe la ley), destaca por
su ingenio, impacto…e ironía, hasta cierto punto
lastimada por el añadido al final que la propia
autora introdujo en la versión teatral y que figura
también en la excelente versión cinematográfica
de Billy Wilder.
Un asunto de salud
Los pacientes y sus médicos son figuras
destacadas en muchas historias de crímenes.
Wilkie Collins situó una discusión médica en el
núcleo de la trama de The Moonstone (1868) (La
piedra lunar), Agatha Christie hizo famoso al
médico de The Murder of Roger Ackroyd (1926)
(El asesinato de Roger Ackroyd), Graham Greene
nos advirtió del daño de la falsificación de
medicamentos en The Third Man (1950) (El
tercer hombre) y Dennis Lehane nos impactó con
su Shutter Island (2003) (Shutter Island) . Con
todo, en mi elección de una novela de misterio en
un ambiente médico vuelvo a la Golden Age
británica y a una de sus autoras más interesantes
Christianna Brand, creadora de Green for Danger
(1944).
Una apuesta homosexual
Puede parecer un tanto extraño dedicar un
apartado al tema de la homosexualidad, pero hay
que tener en cuenta que la aceptación de este tipo
de orientación sexual como algo perfectamente
asumible forma parte de la conquista de
libertades individuales que se emprendió en el
último cuarto del siglo pasado. En este contexto,
autores como Robert Barnard trataron con
absoluta delicadeza este tema (A Scandal in
Belgravia, 1991) pero quién merece una mención
especial es Joseph Hansen, un escritor americano
cuya riqueza estilística se ha comparado con la de
Raymond Chandler y que ha sido catalogado
como uno de los mejores escritores americanos
de novelas de misterio del último cuarto de siglo
XX. Hansen creó un detective fácilmente
admirable y atractivo que es, simplemente,
homosexual: Dave Brandstetter, y entre las
novelas protagonizadas por este investigador cabe