ocupaba de la educación de sus sobrinos Carlos,
Leonor, Isabel y María.
En enero de 1516 muere Fernando el Católico y
el Cardenal Cisneros le sustituye, también por
poco tiempo.
La reina, cuando lo supo quiso saber quién estaba al
cargo de la regencia, al enterarse quedó tranquila.A
veces le venían esos momentos de lucidez.
Carlos tenía 17 años, el deber de marchar a
España que le reclamaba y un montón de
problemas. Decidió emprender el viaje.
Pero no lo tenía fácil. En junio de 1517 reunió en
Gante a los Estados Generales para justificar su
viaje y pedir ayuda, y el 8 de septiembre se hizo
a la vela, camino de su reino. Le acompañaba su
hermana Leonor.
Alcanzaron España por Asturias, en el pequeño
puerto de Tazones.
Ya estaba en un país desconocido, del que no
sabía ni las costumbres ni el idioma.
Tanto Carlos, como Leonor estaban deseando
ver a su madre. Habían pasado once años sin
ella, además conocerían a su hermana pequeña…
y a Fernando, el hermano que había nacido y
crecido en España.
El primer encuentro fue agradable a la reina,
agradable y confuso; al verlos exclamó.
¡Pero estos son mis hijos!
¡Los había dejado tan pequeños!
Pero ¿y Catalina? Carlos y Leonor se angustiaron
al verla. Era una niña rubia y graciosa, vestida de
campesina, con sencillez y pobreza. A sus
hermanos les dolio verla y pensaron en mejorar
su situación.
Había mucho que hablar y que pedir, y allí estaba
Chièvres, una cabeza inteligente, para suavizar las
cosas.
El valido supo plantearlo con habilidad, y
consiguió que la reina pasara a su hijo la carga
de tantos reinos. Ella junto a Carlos, siempre
seria “la reina de estos reinos”. De buen grado
cedió a su hijo el gobierno.
En cuanto a Fernando, sería bueno enviarle a los
Países Bajos. Así se alejaría del partido que le
apoyaba y que querría verle reinando.
Respecto a Catalina, el plan era sacarla de
Tordesillas y llevarla con sus hermanos.
Así lo hicieron. Los servidores del rey la sacaron
de su prisión y de noche la llevaron a Valladolid
junto a sus hermanos. La Corte la recibió con
cariño y muy alegre.
Pero también por poco tiempo. Los lamentos de
su madre al ver que no estaba con ella, fueron
desgarradores. No cesaba de gritar.
“Me han robado a mi hija”
Carlos no tuvo más remedio que devolverla a
Tordesillas.
Todavía le quedaban ocho años de encierro, que
iban a resultarle muy duros.Viviría penas y
problemas en la época de los comuneros.
En 1525 llego por fin su liberación. Se casó con
el rey Juan III de Portugal.
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Pliegos de Rebotica
´2018
Catalina de Aragón como María
Magdalena. Obra de Michel Sittow.
Retrato pintado al final de su
adolescencia o principio
de la veintena.
Retrato de Juan III de Portugal (1552)
por Antonio Moro. En la ciudad de
Salamanca, el 5 de febrero de 1525, se
casó con su prima Catalina de Austria,
hija pequeña de Juana la Loca.
La reina Catalina de Austria, por
Antonio Moro. Ca. 1552-1553. (Museo
del Prado, Madrid).Catalina de Austria.
Reina consorte de Portugal. Infanta de
España y Archiduquesa de Austria.
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