Revista Farmacéuticos - Nº 113 - Abril/Junio 2013 - page 28

L
os biógrafos del santo discrepan sobre las causas del
martirio y sus circunstancias. Las posturas son casi
extremas, que oscilan desde el panegírico laudatorio
hasta la acusación de ambicioso y traidor a su padre,
el rey Leovigildo. Las dos posturas son extremas y
exageradas. Cuatro autores contemporáneos de los
hechos históricos protagonizados por de San
Hermenegildo –Juan de Biclaro en su
Crónica
, San
Isidoro de Sevilla en su
Historia de los Godos y los
Suevos
, San Gregorio en los
Diálogos
y Gregorio de
Tours en
Historia de los Francos
– dan cuenta y razón
de la biografía del santo. Sin embargo, los
testimonios no coinciden e, incluso, pueden llegar a
contradicciones entre ellos. Los autores hispanos
ignoran los datos relacionados con el martirio,
aunque certifican las circunstancias políticas y
sociales de la rebelión. San Gregorio, por el
contrario, ofrece diversos testimonios sobre el hecho
martirial, afirmando que Hermenegildo rechazó la
oferta de perdón por fidelidad a la fe católica, y pasa
superficialmente por las cuestiones políticas.
Gregorio de Tours, por su parte, lo tiene casi por un
rebelde que se subleva contra su propio padre, el rey
(“quien osa levantarse contra su padre, aunque éste
sea un hereje, le espera el juicio divino”), aunque lo
considera mártir en defensa de su fe. En la
actualidad, algunos autores estiman que la conversión
de Hermenegildo, más que la causa del conflicto,
rayano en la guerra
civil, fue un
pretexto o excusa
para su
desencadenamiento.
A Gregorio Magno
debemos la
narración de un
Hermenegildo
héroe de la fe
católica, perseguido
por su padre, al
abrazarla, y
muriendo mártir
ante la negativa de
abjurarla.
Considera,
asimismo, que la
conversión de
Recaredo, y de su
pueblo, no podrían
haber ocurrido si el
rey de la Bética, Hermenegildo, no hubiese muerto
mártir por la verdad.
Ante la complejidad del asunto, L. Vázquez de Parga
(
Diccionario de Historia de España
, Revista de
Occidente, 1968), tercia con las siguientes
consideraciones: “El cronista contemporáneo, Juan de
Biclaro, da la noticia escueta de que en 585 le da
muerte en Tarragona un cierto Gilberto. (…).
Únicamente Gregorio Magno (Dial., 3,31) presenta a
Hermenegildo como mártir por su propio padre, al
negarse a recibir la comunión de manos de un obispo
arriano, y es notable que las fuentes españolas más
próximas al suceso (Biclarense, Isidoro, actas del
Concilio III de Toledo) no hagan la menor alusión a
la conversión de Hermenegildo, al que presentan,
cuando aluden a él, como un simple rebelde. Sin
embargo, no puede hacerse estado absoluto de este
silencio, que pudo ser motivado por consideraciones
políticas".
Por su parte, el hispanista británico E. A. Thompson,
estudioso y conocedor amplio de la sociedad goda
hispánica, resalta los siguientes hechos, a tener en
cuenta para comprender bien la rebelión de
Hermenegildo, su martirio en nombre de la fe y su
posterior elevación a los altares (
Los godos en
España
, Alianza Editorial, 1985):
1) Las monedas en las que Leovigildo y
Hermenegildo proclamaban su asociación con Dios
son únicas entre las monedas visigodas, e indican que
las causa religiosas ocupaban un lugar preferente en
la guerra; 2) Gregorio de Tours no duda en afirmar
que se trataba de una rebelión católica: cuando
Leovigildo se enteró de la conversión de
Hermenegildo, según Gregorio, comenzó
inmediatamente a buscar motivos para combatirle; 3)
Gregorio de Tours no duda de que Leovigildo ordenó
el asesinato de Hermenegildo. Es difícil creer que
Leovigildo, por muy viejo y enfermo que se hallase,
hubiera dejado sin castigo a Sisberto si éste hubiese
ajusticiado al príncipe por su propia iniciativa; y de
hecho Sisberto vivió en el reinado de Recaredo; 4)
En España hubo una conspiración de silencio en todo
lo relativo a Hermenegildo. La respuesta podría ser
que, tras la conversión de Recaredo y el
establecimiento de un estado católico no se consideró
oportuno asociar al catolicismo con la rebelión,
especialmente con una rebelión que había producido
una enorme devastación en España y que había sido
apoyada por los bizantinos; 5) Una vez que España
se había convertido en un estado católico, la rebelión
Joaquín Herrera Carranza
San Hermenegildo
mártir
y (II)
Martirio de san Hermenegildo (s. XV)
P
de Rebotica
LIEGOS
28
1...,18,19,20,21,22,23,24,25,26,27 29,30,31,32,33,34,35,36,37,38,...52
Powered by FlippingBook