Revista Pliegos de Rebotica - Nº 126 julio/septiembre 2016 - page 20

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Pliegos de Rebotica
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HABLANDO ENTRE AMIGOS
sado, es también un vehículo muy sabio. También mi
bola de cristal, que es mi sistema para cambiar mi es-
tado de consciencia y comunicarme con el más allá y
poder percibir otra realidad.Además me sirve de fron-
tera para delimitar los territorios entre los difuntos y
yo. Y yo, Paloma, no permito que me invadan ni que
me manipulen, ni me posean. Porque hay médiums que
se llaman de incorporación que permiten ser poseí-
das por los espíritus. Pero yo no trabajo así. Yo los
veo. Trabajo con ellos. Me hablan, me dan datos. Pero
nada más.
–¿Y qué pasa con el péndulo?
–Eso es otro negociado. Ahí de lo que se trata es de
determinar alteraciones en el campo magnético de la
tierra y por eso se puede encontrar agua o las diver-
sas líneas magnéticas que forman unas cuadrículas en
la Tierra o metales o cualquier otra cosa. Por ejem-
plo los huesos también lo alteran. Pero también pue-
de deberse a fantasmas. Aunque no me es imprescin-
dible, pues se puede hacer de manera directa, yo lo
utilizo para esto y después, cuando ya los veo y de-
termino donde están, uso la bola para hablar con ellos
porque me es más cómodo y, como te decía antes,
me ayuda a delimitar el campo entre ellos y yo.
–Pe ro no es el péndulo o las varillas real-
mente los que lo detectan...
–No. Quien lo hace es quien lleva el péndulo porque
tiene una sensibilidad especial para sentir esas altera-
ciones en el campo magnético de la Tierra que ade-
más no es el mismo en todas partes, por ejemplo en
el centro de España es diferente al de la zona medi-
terránea o al de otras zonas. el péndulo o las varillas
no son más que herramientas para que sea más visi-
ble lo que siente el zahorí. Pero hay personas que no
lo necesitan y simplemente usa las manos para sen-
tirlo mejor.
–Aunque antes solamente hablábamos de
estos temas en pequeños círculos lo que po-
dríamos llamar el común de la calle y ade-
más con un cierto complejo porque con fre-
cuencia teníamos que soport a r b roma s o
descalificaciones, ahora ya personas con
una formación racional y científica como ca-
tedráticos en alguna rama de la ciencia, je-
fes de servicio en hospitales, pilotos o mili-
t a r e s d e g r a d u a c i ó n a l t a , n o t i e n e n
inconveniente en exponer en público, inclu-
so en medios de comunicación serios, sus
experiencias, las vivencias que han vivido
en este sentido.
–Eso demuestra inteligencia y que no tienen miedo a
aceptar que existen otros planos de la existencia,
otros fenómenos que no porque no se puedan ver o
medir, no son reales. No solo lo admiten, es que mu-
chos de ellos están haciendo estudios muy serios en
varios sentidos. Médicos, siquiatras y físicos, están im-
plicados. Sobre todo los neurocientíficos están hacien-
do descubrimientos realmente fascinantes que coinci-
den con aquellas experiencias que antes no se
admitían, se las llamaba alucinaciones o histerismo o
cualquier otra cosa.
–El grupo Hepta es un ejemplo de lo que es-
tamos comentando. Creado por un jesuita,
el padre Pilón, lo que representaba una va-
lentía poco común, estaba formado por una
farmacéutica, tú, un profesor de física de la
Universidad de Alcalá, un sicólogo, una es-
pecialista en fotografía y sonido, un físico
nuclear y un siquiatra utilizando aparatos
muy sofisticados de alta precisión cada uno
en su campo.
–Por ejemplo tenemos un magnetómetro de alta pre-
cisión para determinar el campo magnético, detecto-
res del movimiento, un termómetro diferencial de tec-
nología punta que determina variaciones de la
temperatura en picoteslas y por supuesto cámaras de
infrarrojos y equipo de sonido de alta precisión. De
esta manera las mediciones son exactas y en ellas no
interviene lo que podríamos llamar el factor humano.
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Eso demuestra inteligencia y que
no tienen miedo a aceptar que
existen otros planos de la
existencia, otros fenómenos que
no porque no se puedan ver o
medir, no son reales.
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