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a Farmacia, además de una profesión y un
conjunto de ciencias destinadas
fundamentalmente a la restauración o
mantenimiento de la salud a través del
conocimiento, investigación, dispensación y
preparación del medicamento, es también belleza. Belleza
de unos utensilios, locales y libros mediante los cuales los
profesionales han podido ejercer su labor a lo largo de
los siglos y que forman parte del patrimonio histórico-
artístico, no sólo de la profesión farmacéutica, también de
la sociedad en donde han desarrollado su cometido.
Este patrimonio cada día más menguante, pero
todavía significativo, es en muchos casos visible en sus
establecimientos originales gracias a sus propietarios,
como es el caso de las múltiples boticas centenarias que
todavía funcionan en ciudades y pueblos de la península.
También cabe agradecer la conservación de este ingente
patrimonio a las instituciones públicas. Por último cabe
señalar la labor de las entidades relacionadas con la
profesión farmacéutica como es el caso de las facultades
de Farmacia, Colegios de Farmacéuticos, y Academias de
Farmacia.
Este trabajo se centra en las Academias de Farmacia
españolas y las funciones de conservación del patrimonio
que tienen contempladas en sus estatutos y reglamentos
y cual es su desempeño para su salvaguarda.
Concretaremos las acciones de presente y futuro de la
Academia de Farmacia “Reino de Aragón” para
establecer su sede definitiva en lugar paradigmático del
patrimonio farmacéutico aragonés y las ideas para su
musealización.
Las Academias de Farmacia y el patrimonio
farmacéutico.
Real Academia Nacional de Farmacia
Entre los fines de la Real Academia Nacional de
Farmacia destacan el salvar y proteger el patrimonio
farmacéutico español que conserva la Academia, tanto el
Archivo Histórico, como el Fondo bibliográfico y
museográfico. Este punto se puede considerar desarrollo
del primero de sus fines:“Fomentar la investigación y el
estudio de las Ciencias Farmacéuticas y sus afines”. Esta
actividad va ser común en el resto de Academias de
Farmacia del Estado Español y que surgirán de ésta, tal y
como se expondrá a continuación.
La idea de contar con un museo aparece en el
Reglamento de Régimen Interior de 1891, que dispone
que con los trabajos, obras u objetos presentados a los
premios de la Academia y con las donaciones que se
hagan se formará un museo. La Real Academia de
Farmacia ha recibido donaciones para la instalación de su
Museo, entre los que hay que destacar, una farmacia
neogótica madrileña de finales del siglo XIX base del
mismo. Se completa con múltiples objetos relacionados
con la profesión
También básico para el patrimonio farmacéutico es su
biblioteca. Existen otras publicaciones monográficas
especializadas en Farmacia y Ciencias Afines como
farmacopeas, herbarios, tesis doctorales y trabajos de
investigación.
La Reial Academia de Farmacia de Catàlunya
En el caso de la Reial Acadèmia de Farmacia de
Catàlunya según sus estatutos del año 2013 forman el
patrimonio de la Academia:
a) La Farmacia del antiguo Hospital de la Santa Cruz
con su colección de botes y cajas de boticario y otros
objetos de interés científico, histórico y artístico.
b) El Museo Cusi de Farmacia con la Farmacia del
Monasterio de Santa María la Real de Nájera y todas sus
colecciones.
c) Las publicaciones de la Academia y los ejemplares
de libros, revistas y folletos que integran la biblioteca.
El 16 de mayo de 1944 se constituyó la Sección
PREMIOS AEFLA 2015
11
Pliegos de Rebotica
´2016
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REIG JOFRE
Segundo Premio
Patrimonio Histórico-Artístico
Farmacéutico Español
Carmen Palos Martín
Academias y patrimonio: la academia de
farmacia
Reino de Aragón
y la génesis de su sede –museo