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NUEVOS FÁRMACOS
Panorama Actual Med 2013; 37 (365): 614-617
FILTRACIÓN GLOMERULAR RENAL
Aunque tan solo representan el 0,5% del peso
corporal, los riñones reciben el 25% del volumen
minuto cardiaco. La
tasa de filtración glomeru-
lar
(TFG) es considerada como el mejor índice de
funcionamiento renal tanto en personas sanas
como enfermos, facilitando una excelente medida
de la capacidad de filtración del riñón, lo que re-
fleja la masa funcional renal. Esto permite detectar
cualquier enfermedad renal progresiva, que siem-
pre es precedida de un descenso del filtrado glo-
merular; asimismo, proporciona información sobre
la progresión de la enfermedad, siendo un exce-
lente predictor del tiempo hasta el comienzo del
fallo renal y de las complicaciones de la enferme-
dad renal crónica; en concreto, la reducción de la
TFG se correlaciona con la gravedad de las altera-
ciones estructurales, como la fibrosis tubulointers-
ticial y con la aparición de síntomas cuando dis-
minuye por debajo de 10-15 ml/min. Finalmente,
facilita también un adecuado ajuste de dosis de
fármacos excretados por filtración glomerular y la
evaluación de la eficacia de los tratamientos para
la enfermedad renal (
Gil, 2007
).
La insuficiencia renal aguda (IRA) implica un
deterioro brusco (en horas o días) y sostenido de
la TFG que produce un aumento en los niveles
plasmáticos de urea y creatinina, con o sin oligu-
ria (producción de orina inferior a 500 ml/día). Se
habla de IRA cuando la creatinina sérica aumenta
≥
0,5 mg/dl sobre el valor basal (o su valor au-
menta más de un 50% sobre el basal) o la TFG dis-
minuye en un 50%. Los fármacos son responsa-
bles hasta de un 25% de las hospitalizaciones por
insuficiencia renal aguda en la población general
y este porcentaje puede llegar hasta el 66% en la
población anciana. Por su parte, la enfermedad o
insuficiencia renal crónica es un proceso fisiopato-
lógico con múltiples causas, cuya consecuencia es
la pérdida del número y el funcionamiento de las
nefronas, que se manifiesta por una reducción de
la TFG por debajo de 60 ml/min/1,73 m
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y que, a
menudo, termina en una insuficiencia renal termi-
nal. Las causas más frecuentes son la nefropatía
diabética, la hipertensión arterial y las glomeru-
lopatías. Como consecuencia, los riñones pierden
su capacidad para concentrar la orina, mantener
el equilibrio hidrosalino y eliminar fármacos y otras
sustancias hidrosolubles de desecho (
Tamargo,
2012
).
Una prueba clásica para determinar la tasa de fil-
tración glomerular consiste en determinar el
aclara-
miento de creatinina
, mediante la recogida de la
orina de 24 horas, junto con una muestra de san-
gre y se comparan ambas cantidades. La concentra-
ción de creatinina es plasma es un indicador de la
tasa de filtración glomerular, ya que su aclaramiento
se aproxima y su tasa de excreción se mantiene rela-
tivamente constante. La concentración de creatinina
en plasma depende principalmente del metabolismo
muscular de la creatina y su producción es propor-
cional a la masa total de cada persona.
Sin embargo, aunque la creatinina presente en
el plasma sanguíneo es filtrada libremente por el
glomérulo, es también secretada activamente en el
túbulo contorneado proximal, por lo que el aclara-
miento de creatinina sobreestima la filtración glo-
merular entre un 10% y un 40% en personas sanas
e incluso más en pacientes con insuficiencia renal.
Adicionalmente, existe una eliminación extrarrenal
de creatinina (debida fundamentalmente a la flora
bacteriana del intestino delgado), que está especial-
mente incrementada en pacientes con insuficiencia
renal crónica, lo que reduce la excreción renal de
creatinina en estos pacientes, llegando a representar
la excreción extrarrenal hasta dos tercios de la excre-
ción total de creatinina.
Por otro lado, la determinación del aclaramiento
de creatinina puede verse afectada por una serie de
factores independientes de la propia filtración glo-
merular (edad, sexo, índice de masa corporal, fárma-
cos, raza, metodología del laboratorio, etc.). Por ello,
en la actualidad se utilizan ciertas ecuaciones que
corrigen los errores de la determinación aislada de la
creatinina plasmática, a la vez que convierten la rela-
ción hiperbólica entre los valores de aclaramiento y
las concentraciones plasmáticas de creatinina en una
relación lineal. Entre ellas, la
fórmula de Cockcroft-
Gault
es quizás la más utilizada, al menos para el
ajuste de dosis de fármacos.
Por todo ello, la medición del filtrado glomeru-
lar precisa de una sustancia que presente una con-
CROMO (
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Cr) EDTA GE HEALTHCARE
®
(GE Healthcare)
EDETATO DE CROMO [
51
Cr]