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Pliegos de Rebotica
2017
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ra sólo 13 de junio, pero el verano anticipaba
que iba a ser caluroso.A pesar de ello, un
nutrido y animoso grupo nos dimos cita en la
bella sede de la Asociación de Escritores y
Artistas Españoles para celebrar el acto de
entrega de los tradicionales premios de AEFLA. Si bien la
sede está decorada con multitud de cuadros, en su
mayoría retratos de nombres ilustres de nuestras artes,
pusimos nuestro efímero granito de arena incluyendo
entre los de la entrada la obra fotográfica de nuestros
participantes y el cuadro ganador.Tras las palabras de
bienvenida de nuestro presidente comenzamos una
velada que se prometía amena.
Cada uno de los premiados nos fue leyendo su obra,
hasta el momento, inédita. En prosa,Andrés Morales
Rotger nos leyó un bello cuento:“La Dama de las horas
perdidas” una historia de amor y piedra capaz de vencer
al tiempo. Por el contrario, el compañero premiado en
poesía, Jorge de Arco, con “París es una noche que me
mira” nos propuso un lírico paseo por sus recuerdos
juveniles en la ciudad del Sena.Ambos premios fueron
patrocinados por Laboratorios CINFA y entregados
entre merecidos aplausos.
El Premio de Patrimonio Histórico-artístico
Farmacéutico (patrocinado por Laboratorios REIG
JOFRÉ) recayó este año en un grupo de jovencísimos
compañeros (Lorena, Begoña, Marcos y Abraham) que
resaltaron la importancia de un patrimonio inmaterial
muy emocional para todos nosotros: Las tertulias de
rebotica.Aquellas que creíamos extintas como efecto
secundario de los frenéticos y tecnológicos tiempos
actuales. Nos explicaron, desde un prisma renovado, que
no están muertas sino en periodo de transformación,
que siguen existiendo pero adaptadas al momento
presente.
Tras las palabras de agradecimiento y despedida del
presidente y los consabidos aplausos a los ganadores y a
sus generosos patrocinadores, nos levantamos de
nuestros sitios y nos dispusimos a la charla. Dado que a
la entrada se nos acumulaban las prisas por no llegar
tarde, los múltiples saludos a los compañeros y la
intención de coger un buen sitio, no fue hasta el final de
la sesión que pudimos recrearnos con la revisión de las
fotografías que los candidatos nos habían hecho llegar y
contemplar la inmensa alegría que transmitía la ganadora
(“Infancia”) obra en blanco y negro deVerónica Gallego
Albert, tan vital como oportuna, que nos trasladó a
todos a nuestras infancias respectivas. Creo que
COFARES se sentirá orgulloso de patrocinar una foto
con un efecto así.
Realmente las fotos fueron muy comentadas, sin duda
gracias también al agradable corrillo que se formó
con bombones y cava que inducía a disfrutar un
poquito más del ambiente.Y entre todas las fotos allí
estaba, reinando en la estancia, el cuadro ganador
“Empatía”, obra de Genoveva Chóliz, impactante
retrato cuya protagonista nos hacía entrever tierras
lejanas y amplios horizontes a través del realismo de
sus ojos.Tras ello, poco a poco nos despedimos y
cada cual fue volviendo a su casa.
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Premios
AEFLA 2016
Mesa presidencial de izquerda a derecha Enrique Granda Vega, Raúl Guerra Garrido,
Margarita Arroyo y Isabel Reig, Presidenta Reig Jofre.
