En el viento tampoco
Francisco Mena Cantero
Francisco Mena Cantero
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Ediciones Vitruvio
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Madrid 2014
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76 páginas
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Y
a dimos noticia en esta sección de un libro
anterior de Francisco Mena Cantero. Pensé que
había sido poco tiempo atrás y compruebo
asombrado que se trató de una obra publicada hace
siete años,
El pájaro y su vuelo
.Así de poco fiable es
nuestra percepción del tiempo, pero sin embargo me
creo capaz de reconocer la huella de este poeta del sur
que no ha dejado de avanzar y cuya entrega a la poesía
ha sido constante.
Nos encontramos aquí ante un diálogo interior con
ese Dios al que no se puede atrapar pero a quien
se puede afirmar, apoyado en unos pies que
caminan por la arena y en unas manos que laboran
la madeja del perderse y encontrarse. Poemas que
buscan lo permanente y que practican la inteligencia
y la reflexión no solo mental sino, la que según
Zubiri es capaz de sentir. Sensaciones limpias, de
una sinceridad que uno puede simplemente abrazar.
En el viento tampoco
está estructurado en dos partes,
con 27 poemas de verso blanco y 8 sonetos
intercalados para transitar por ese mar de fondo o
mar sin fondo que el hombre sensato no puede
soslayar. Se trata de una escritura elevada pero no
alambicada. Las imágenes y metáforas no son el
refinamiento culto de un poeta que tiene muchas
horas detrás, sino el enfoque necesario para
enfrentarse a lo esencial, para poder trascender al
hombre que da vueltas siempre al mismo día, una y
otra vez, pero que no deja por eso de compartir su
escritura y la alegría del pan sobre la mesa.
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La fiesta de la insignificancia
Milan Kundera
Milan Kundera
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Tusquets editores
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Barcelona 2014
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142 páginas
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A
unque no era su primer relato, muchos de
nosotros conocimos al escritor checo Milan
Kundera, por su obra
La insoportable levedad del ser
que fue llevada al cine por el director americano Philip
Kaufman en 1988. Ahora aparece su última novela, primera
tras 14 años, cuando el autor, residente en Francia, tiene
ya 85. Por supuesto que su publicación era muy esperada.
Parece que se nos quiere decir, en esta fiesta peculiar a la
que alude el título, que la insignificancia es esencial en la
vida y está presente en todos los sitios, incluso allí donde
nadie quiere verla.
Sus pequeñas historias entrelazadas, sus personajes
intercambiables, su recorrido entre convencionalismos y
dobles sentidos, reflejan una sociedad superflua y exigua y
aunque para el autor la insignificancia no vaya unida a la
mediocridad, no se alcanza a ver algún desmontaje de la
seriedad, puede que porque Kundera sea consciente de
que la literatura ya ha combatido la pomposidad muchas
veces o puede que porque simplemente la intención no
haya sido esa.
Dos protagonistas, hasta cierto punto solo conocidos, se
encuentran en un parque y uno de ellos miente sin saber
por qué. Esa mentira le conducirá a ser invitado a la
fiesta. Otros piensan en sus madres, reflexionan sobre la
pulsión sexual y desvelan alguna parte de su historia.
Intervendrá Stalin con una vieja hazaña sobre la caza de
perdices que el dictador contaba a sus ayudantes, una
pluma planeará desde el techo. Indudablemente hay un
sentido del humor inteligente y fino, pero al cabo no
resulta muy divertido.
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LIBROS
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