Año nuevo en el mundo
Albert M. Rebhun
Fundación AL-AISSIYA
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Madrid 2015
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80 páginas
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A
costumbrados como estamos a las prácticas oc-
cidentales, nos resulta difícil imaginar lo diferen-
tes que son las maneras de terminar el año en-
tre los pueblos del mundo. Todas ellas representan en
cierto modo la despedida, siempre con alguna añoranza,
de lo viejo y los buenos deseos para afrontar lo que vie-
ne a continuación. Uno de los personajes de este rela-
to destaca que año nuevo es un tiempo en el que de-
bemos pensar más en los que nos rodean y en evitar las
disputas. La buena voluntad se impone cuando las gen-
tes reflexionan.
Desde el oeste de los Estados Unidos de América, Al-
bert Rebhun, americano de origen polaco, reflexiona so-
bre estos temas a través de una larga conversación de
estudiantes en la nochevieja de Washington, en el dor-
mitorio colectivo de una escuela internacional. Son es-
tudiantes jóvenes que oyen la algarabía que se produce
tras las doce campanadas y que intercambian sencilla-
mente las experiencias de sus países de origen. Dan pie
a lo que podríamos llamar la hermandad entre los dis-
tintos y también a la felicidad de conocer lo diferente.
Entonan a su manera un canto colectivo a la paz.
La traducción y la edición de este relato se deben a
Jesús Riosalido, embajador y polígrafo de reconocido
prestigio que sostiene en su prólogo la necesidad de que
un orientalista conozca tanto la cultura árabe como la
hebrea. Predicando con el ejemplo, él ha ejercido ambas
ramas con acierto.
Año nuevo en el mundo
es el tercero de los relatos
de Rebhun traducidos por Riosalido, dándose la circuns-
tancia de que los dos anteriores,
Hymie, la hiena risueña
y
Francisco y las tunas
, se publicaron en nuestra revista
Pliegos de Rebotica
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Historias de ranas
Carlos Lens
Plataforma Editorial
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Barcelona 2015
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176 páginas
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T
ras una interesante trayectoria de cinco novelas que
podríamos calificar de serias si este no fuese un tér-
mino tan equívoco, llegan de manera más silenciosa
aunque hermosamente editadas, estas historias de ranas
de nuestro compañero Carlos Lens.
En contra de lo que pudiera pensarse por el título, no se tra-
ta de un libro de cuentos o de narraciones sino propiamen-
te de una novela. Es una novela para todas las edades, para
todos los públicos, que adopta a veces el corte pedagógico
de las fábulas. No se persigue convencer de una conducta éti-
ca pero sí mostrar enseñanzas positivas que seducen. Como
en los documentales de la naturaleza, la unidad de tiempo nos
la dan las cuatro estaciones del año y los personajes perma-
necen ahí, atravesando capítulos y episodios, para que nos en-
cariñemos con ellos.
Fueron escritas para acompañar las noches y conducir a un
hijo pequeño hacia el sueño tranquilo pero cobraron empa-
que y sedujeron a su escritor en la tarea de divertirse dando
vida a una familia de ranas que habita un riachuelo. Enseña la
vieja lección de cómo hacer frente a las dificultades de la na-
turaleza, la conveniencia de ser positivos y valerosos y la ne-
cesidad de utilizar la protección de la experiencia. No falta el
humor en dosis individuales que también abarca la paradoja
de las situaciones y que contribuye a la simpatía del libro.
Aquí está en su esplendor el idioma humano de las ranas.
Los bosquimanos de África del Sur creen que hubo un tiem-
po en que todos los animales de la tierra eran capaces de
hablar. Apareció un brujo poderoso que aborrecía a los ani-
males y un día desapareció y se llevó consigo ese don. Este
libro lo recupera para los batracios.
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LIBROS
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