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Panorama Actual del Medicamento
REVISIÓN
cilio del paciente – y mantener medidas de seguri-
dad para evitar accidentes y complicaciones. Para
ello, es necesario mantener unas rutinas estables,
reforzar la orientación con calendarios visibles que
vayan marcando los días, señalizar las habitaciones
de la casa o el contenido de los armarios con car-
teles escritos o fotos según el estadio de la demen-
cia, crear un ambiente agradable evitando ruidos
molestos, manteniendo una iluminación adecuada
y evitando ambientes recargados.
Para favorecer la autonomía para vestirse es
importante simplificar al máximo las opciones de
ropa que encuentre en el armario, así como utili-
zar ropa sencilla y cómoda, sustituyendo botones,
cremalleras y cordones, por velcros y gomas. Para
evitar la incontinencia, es útil llevarle al baño pe-
riódicamente aunque no tenga ganas, con el fin
de anticipar su necesidad, evitando el uso de pa-
ñales hasta las fases más avanzadas. La actividad
física y los paseos diarios aminoran la alteración
del ritmo circadiano y el ejercicio físico aeróbico
mejora la coordinación, el estado de ánimo, el in-
somnio y las relaciones sociales.
En la alimentación es preciso que le resul-
ten atractivos los alimentos, sobre todo si el
paciente presenta inapetencia; en general, los
pacientes dementes tienden a preferir los sabo-
res dulces. Es fundamental mantener una buena
hidratación y, en ocasiones, precisará suplemen-
tos proteicos. En fases más avanzadas aparece
disfagia orofaríngea a líquidos, por lo que se
deberán usar espesantes para los mismos para
evitar infecciones respiratorias al producirse as-
piraciones pulmonares.
Se debe instruir al cuidador sobre la necesi-
dad de que hable despacio al paciente, con un
tono de voz cálido, con frases cortas y sencillas,
evitando realizar preguntas con varias opciones,
combinando la comunicación verbal y no verbal.
Mantener el contacto visual es importante, evi-
tando colocarse muy lejos o muy cerca del pa-
ciente, pero recurriendo al contacto físico suave
si es preciso para mantener la atención. Es muy
importante no tener prisa en las respuestas y
nunca mostrarse agresivo, intentando no llevar
la contraria al paciente. Es preferible intentar un
cambio de actividad cuando el paciente no cola-
bora, para luego reconducirle, que enfrentarse
directamente al paciente o reñirle por su falta de
cooperación.
Por último es preciso poner una gran atención
en la prevención de accidentes, guardando - in-
cluso bajo llave – todos aquellos objetos potencial-
mente peligrosos, eliminando los cerrojos interio-
res, protegiendo radiadores y ventanas, y colocar
una pulsera o collar identificativo personal para
facilitar la recuperación del paciente en caso de
extravío o fuga del domicilio. Con el fin de evitar
las caídas, es conveniente retirar o fijar alfombras
y cables, evitar la colocación de muebles que obs-
taculicen las vías de paso habitual del paciente,
así como fijar la lámpara a la mesilla de noche y
mantener la iluminación nocturna en el recorrido
al baño, instalando asideros en la bañera y el ino-
doro.
Aspectos asistenciales farmacéuticos
Desde la oficina de farmacia es especialmente
importante ofrecer al cuidador un
servicio per-
sonalizado de dispensación
(
SPD), empleando
para ello dispositivos adecuados para una correcta
aplicación de las pautas posológicas y una ade-
cuada adherencia al tratamiento de los medica-
mentos prescritos, ya que los pacientes suelen
estar intensamente polimedicados. Por este mismo
motivo, debe ofrecérsele al cuidador un
segui-
miento farmacoterapéutico
que incluya la revi-
sión del botiquín, a fin de eliminar todos los medi-
camentos caducados o potencialmente peligrosos
que no hayan sido prescritos recientemente, así
como advertir la posibilidad de peligrosas
interac-
ciones farmacológicas
.
En este sentido, es evitar
el consumo de ningún medicamento que no haya
sido prescrito por el médico, aunque sea de uso
habitual. Es muy útil darle al cuidador las instruc-
ciones impresas, siempre de la forma más sencilla
y, en la medida de lo posible, bajo la forma de lista
o rutina diaria.
No debe olvidarse en ningún momento por
el farmacéutico, que el déficit neurológico aso-
ciado a la enfermedad de Alzheimer y a otras
demencias suele estar relacionado con un dé-
ficit colinérgico, por lo que es especialmente
importante atender a las propiedades farmaco-
lógicas de los medicamentos que utilizan estos
pacientes y, en particular, a su
potencial acti-
vidad anticolinérgica
.
Debe tenerse presente
que algunos de los fármacos susceptibles de
ser utilizados por pacientes demenciados tie-
nen una clara actividad anticolinérgica, tales
como algunos antiparkinsonianos (trihexifeni-
dilo, biperideno, etc.), algunos antihistamínicos
utilizados para prevenir el mareo de los viajes
(
dimenhidrinato, etc.) o como hipnóticos (doxi-
lamina, hidroxizina, etc.), antipsicóticos de tipo