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uropean Pharmaceutical Law Group (Eupharlaw), presidido por Manuel Amarilla, concede anual-mente, desde 2001, el Premio Euphar-law a la personalidad del año en el sec-tor farmacéutico, que a partir de este año se denomina Premio Eupharlaw-Ibercisalud, ya que se suma a esta ini-ciativa El Foro Iberoamericano Ciu-dadanos y Salud (Foro Ibercisalud), asimismo presidido por Amarilla. El Premio Eupharlaw-Ibercisalud amplía de este modo su ámbito para premiar, por la contribución a la mejo-ra de la información terapéutica, y la política farmacéutica, a la personali-dad del año en el sector farmacéutico, ya no sólo europeo sino también en el iberoamericano.

En esta ocasión, el Undécimo Premio Eupharlaw-Ibercisalud ( ex aequo ) a la personalidad del año 2011 en el sector farmacéutico ha sido otorgado a Íñigo

Barreda y Miguel Jara por su contribu-ción a la mejora de la información tera-péutica de los ciudadanos en salud. Amarilla ha declarado que son los primeros periodistas premiados con este galardón, y se han valorado sus trascendentes trayectorias independien-tes –aunque diferentes– en este impor-tante y novedoso ámbito de la informa-ción.

La entrega de dicho premio se cele-brará a principios del mes de julio. ✥

ste Primer Congreso “Nutrición desde la Farmacia”, que se celebra-rá en Madrid del 9 al 11 de mayo, tiene como objetivo resaltar el rol que corresponde al farmacéutico en mate-rias de nutrición y prevención sanitaria en general, tanto por su dilatada prepa-ración académica como por su forma-ción continuada. El Consejo General de Colegios Farmacéuticos, la Federación Española de Sociedades de Nutrición, Alimentación y Dietética (FESNAD) y la Sociedad Española de Endocrinolo-gía y Nutrición (SEEN) forman parte del Comité Organizador y Científico. Más información en la página web http://nutriciondesdelafarmacia.es. ✥

a revista Acofar cumple 50 años. El primer número vio la luz en el mes de febrero de 1962, y su ges-tor era el farmacéutico Bravo Albarés. Estos profesionales tendrían un exclu-sivo medio de expresión, al igual que otras profesiones liberales, como eran los médicos, los ingenieros, los arqui-tectos, etc.

Esta revista es referente en el mun-do de la prensa profesional y excepcio-nalmente la decana; por ello es un logro para cualquier publicación continuar en primera línea a pesar de los tiempos difíciles que protagonizan estos últimos años y la actualidad.

Son 50 años con las páginas abiertas a colaboradores de prestigio relaciona-dos con la investigación, el conocimien-to, el cooperativismo, el asociacionis-mo, la industria y la política. ✥

epe se nos fue, sin dar “tres cuar-tos al pregonero”, como a él siempre le gustó: “de puntillas”, sin hacer ruido, ni molestar a nadie: con los suyos y en su casa. Gran profesor muy querido y valorado por sus alumnos, a quie-nes durante décadas

les enseñó “Química inorgánica”. Como director de ese Departamen-to, se ganó también el respeto y cari-ño de sus compañeros. Casi siempre fue miembro de Junta de Facultad. Su ponderación y buen criterio, junto con su fina ironía, sazonados de sabiduría hispalense, le hicieron, para mí, un hombre excepcional. Eso me llevó a proponerle como vicedecano de la Facultad de Farmacia de la Uni-versidad Complutense de Madrid. Durante muchos años me acompañó en esa difícil andadura, también como secretario de la Fundación Rafael Folch y tesorero de la Asociación de Antiguos Alumnos de la Facultad de Farmacia. Todo un caballero. Para mí fue mucho más que un gran amigo, leal y fiel. Su perspica-cia, prudencia y bonhomía siempre han constituido un gran ejemplo para todos los que hemos tenido la suerte de haber convivido con él. Siempre procuré que leyera todos mis escritos y comunicados; como hombre cabal que fue, su opinión me ofrecía total confianza. Siempre mostró su orgullo de ser farmacéutico complutense; fue un hombre de cultura enciclopédica; no envano, poseíaunamagníficabiblio-teca. Su mujer (profesora de Letras) y sus cuatro hijos (una de ellos vice-presidenta del COF de Guadalajara) deben de estar bien orgullosos. Para mí tuvo dos defectos: fumar demasiado y no subir nunca a un avión. ¡Descansa en paz!

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