Ginseng PLANTAS MEDICINALES 436 secretan TNF-α y células T, que secretan IFN-γ e IL-10. Rb1 induce también la producción de ciertas inmunoglobulinas, como IgA, IgG1 o IgG2a y potencia la expresión de IFN-γ desencadenada por virus. En relación con Rg1, ejerce su actividad inmunomoduladora también a través de diferentes mecanismos. Estudios realizados tanto in vivo como in vitro han demostrado que esta molécula puede activar la vía de señalización del factor nuclear eritroide 2 (Nrf2), generando protección hepática frente a toxinas y enfermedades. Además, se ha demostrado que tanto el ginsenósido Rg1 como los extractos de ginseng mejoran la actividad de las células natural killer (NK). En relación con los polisacáridos, el extracto acuoso de polisacáridos obtenido a partir de la raíz de ginseng aumentó los niveles de TNF-α y NO, adicionalmente a la capacidad de suprimir el aumento fisiológico de estos mediadores proinflamatorios inducido por LPS. Esto podría explicarse si consideramos que el ginseng ejerce una acción inmunomoduladora en lugar de una acción estimulante o supresora. ACCIÓN SOBRE EL METABOLISMO Se ha demostrado que el ginseng ejerce efectos beneficiosos sobre el metabolismo de los lípidos y la glucosa. Las investigaciones realizadas en animales y modelos celulares, además de ensayos clínicos, han puesto de manifiesto que tanto diferentes extractos de la planta como diversos ginsenósidos aislados poseen efectos beneficiosos sobre la diabetes, especialmente la diabetes tipo 2. La mayoría de los estudios con ginsenósidos individuales se han centrado en Rb1, Re o Rg1, que son los componentes principales, habiéndose concluido que pueden reducir los niveles de glucosa al aumentar su captación, disminuir su producción, inhibir la gluconeogénesis hepática y reducir la glucosa en sangre. Las evidencias acumuladas han indicado que la reducción farmacológica de la captación de glucosa intestinal mediada por los transportadores de glucosa dependientes de sodio 1 (SGLT1) puede ser un enfoque terapéutico eficaz para combatir o tratar la diabetes; en esta línea, el ginsenósido Rg1 reduce la captación de glucosa intestinal mediada por el mencionado transportador. También los ginsenósidos Rg1, Rg3, Re, Rb1, Rb3, Rg2, Rg5, Rk3, Rb2 y el Compuesto K, exhibieron un efecto hipoglucemiante significativo en modelos animales diabéticos inducidos por dieta rica en grasas o por estreptozotocina (STZ) y modelos celulares in vitro. Aunque el mecanismo antidiabético del ginseng no se ha aclarado por completo, los datos disponibles indican que la regulación de la glucosa en sangre por el ginseng posiblemente esté relacionada con diferentes aspectos, que resumiremos a continuación. Extractos de ginseng modulan los niveles de glucosa en la sangre al mejorar la función de las células β y mejorar la sensibilidad a la insulina, habiéndose demostrado que un extracto de bayas de P. ginseng aumentó la proliferación de células β y la secreción de insulina mejorando el control glucémico en ratones diabéticos inducidos por estreptozotocina (en adelante, STZ). Este extracto también podría mejorar la sensibilidad a la insulina en ratones C57BL/6 de más de 15 meses, probablemente al aumentar la activación de IRS-1 y AKT. En relación con la actividad de los componentes de los extractos, han sido estudiados en estudios in vivo tanto los ginsenósidos de tipo protopanaxadiol (PPD) como los ginsenósidos de tipo protopanaxatriol (PPT). Así, el ginsenósido Rb1, uno de los principales ginsenósidos de tipo PPD, reduce los síntomas de disminución de la sensibilidad a la insulina y aumento de la glucosa en sangre causados por la inducción de una dieta rica en grasas en ratones diabéticos. En otro trabajo con un modelo de rata diabética inducida por STZ, los investigadores encontraron que un ginsenósido principal de tipo PPT, Rg1, puede reducir la resistencia a la insulina y la glucosa en sangre, y también mejorar el perfil de lípidos en sangre y la función hepática, lo que sugiere que Rg1 puede ser una terapia adyuvante potencial para pacientes diabéticos tipo 2 con enfermedad de hígado graso. En segundo lugar, el ginseng puede mejorar la captación de glucosa al aumentar la expresión de los transportadores de glucosa (GLUT), reduciendo tanto el peso corporal como los niveles de glucosa en sangre, de forma que las expresiones de GLUT1 y GLUT4 pueden estar significativamente reguladas por el ginseng tanto en el hígado como en el músculo, tal como se ha comprobado en estudios con distintos tipos de ginseng (rojo fermentado y negro). Los ginsenósidos Rg1 y Re aumentaron las expresiones de GLUT4 a través de las vías de AMPK en las células musculares C2CI2 y mediante el aumento de la actividad de PPAR-γ en las células 3T3-L1, respectivamente. Además, también se observaron otros cambios fisiológicos beneficiosos, como una reducción del colesterol total y los triglicéridos, y un aumento de PPAR-γ y PEPCK después de la administración de ginseng. También contribuye al efecto antidiabético la acción supresora del estrés oxidativo a través del aumento de la actividad de SOD y la disminución de la producción de MDA observada tras tratamiento con polisacáridos de ginseng en ratones diabéticos inducidos por STZ, o ginsenósido Rg1 en ratas diabéticas inducidas por STZ. Además, en un modelo de rata diabética tipo 1 inducida por STZ, el ginsenósido Rh2 redujo la glucosa en sangre en ayunas y mejoró la función cardíaca al mejorar la señalización de PPAR-δ en ratas diabéticas con fibrosis cardíaca. En un modelo de ratón LDL, el extracto de ginseng rojo enriquecido con Rg3 disminuyó significativamente los niveles de glucosa, triglicéridos, lipoproteínas de baja densidad, alanina aminotrans-
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