PAM453

MEDICAMENTOS EN ESPAÑA 504 Tralokinumab en dermatitis atópica Aspectos innovadores Tralokinumab es un nuevo anticuerpo monoclonal humano que se une específicamente a un epítopo de la IL-13 que se superpone con su sitio de unión a los receptores α de IL-13 (IL-13Rα), y previene la unión de esta citocina tanto a los receptores IL-13Rα1/IL-4Rα como a los IL-13Rα2. Así, neutraliza la actividad biológica de la IL-13, que es, junto a la IL-4, una de las principales citocinas implicadas en la patogenia de la inflamación tipo 2: entre otras acciones, favorece el cambio de isotipo de las células B para la producción de IgE, el reclutamiento de células efectoras proinflamatorias o la alteración de la barrera epidérmica. Dado que la inhibición de su vía de señalización con tralokinumab tiene importantes efectos antiinflamatorios, el medicamento ha sido aprobado para el tratamiento por vía subcutánea de la dermatitis atópica (DA) de moderada a grave en adultos que son candidatos a tratamiento sistémico. Su autorización se ha sustentado en los datos derivados de tres amplios estudios pivotales de fase 3, doblemente ciegos y controlados por placebo, que incluyeron a casi 2.000 pacientes adultos con enfermedad moderada-grave y refractarios a tratamiento tópico; la población estudiada puede considerarse representativa de la población diana a la cual se dirige el fármaco. Dos de esos estudios evaluaron su uso en monoterapia y demostraron la superioridad de tralokinumab frente a placebo tras 4 meses de tratamiento, con aumentos estadísticamente significativos en la proporción de pacientes que se benefician clínicamente: se duplicó la tasa de respondedores con aclaramiento total o casi total de la piel según la escala IGA (16-22% vs. 7-11% con placebo) y también según la respuesta EASI-75 (25-33% vs. 11-13%). Se observó también una reducción notable de la intensidad del prurito (mejora de ≥ 4 puntos en la escala NRS en 20-25% de los pacientes vs. 9-10% con placebo) y en la puntuación del índice de calidad de vida asociada con la enfermedad (reducción media de 8-9 puntos respecto al estado basal vs. 5-6 puntos con placebo). De modo interesante, uno de los estudios probó que el tratamiento continuado con tralokinumab durante 1 año favorecía un crecimiento adicional de las tasas de respuesta, manteniéndose en más del doble respecto a placebo (59% de respuesta IGA 0/1 vs. 25% con placebo, y respuesta EASI-75 de 56% vs. 21%). El tercer estudio probó que tralokinumab asociado con corticoides tópicos aporta una tasa de respuesta incluso mayor que en monoterapia: frente al solo uso de corticoides tópicos (grupo placebo) un tratamiento combinado durante 4 meses indujo una eficacia De forma similar, el tratamiento con tralokinumab asociado a corticoides tópicos (estudio ECZTRA 3) también se reveló significativamente superior a la monoterapia con corticoides tópicos (grupo placebo) en las tasas de respuesta de IGA 0/1, EASI-75 y/o de una mejora ≥ 4 puntos en la intensidad del prurito según la escala NRS a la semana 16, permitiendo reducir en un 50% el uso de corticoides tópicos. La reducción del picor se verificó desde la 2ª semana de tratamiento, en paralelo a la mejora de las manifestaciones y de la calidad de vida asociadas a la DA. Entre los pacientes respondedores, la prolongación del tratamiento combinado durante otras 16 semanas adicionales permitió mantener elevadas las tasas de respuesta, en el entorno del 78-90% para IGA 0/1 y de 91-93% para EASI-75; la mejora media de la puntuación de la escala EASI se movió en el entorno del 90% a la semana 32. Entre los pacientes inicialmente no respondedores, el tratamiento combinado de tralokinumab y corticoterapia tópica permitió alcanzar en la segunda fase del estudio tasas de respuesta de IGA 0/1 del 31% y de EASI-75 del 56%; esa respuesta también se acompañó de un beneficio importante sobre el prurito. Por último, el perfil toxicológico del fármaco parece adecuadamente definido por los datos disponibles de casi 2.000 pacientes que recibieron inyecciones subcutáneas, asociadas o no al uso concomitante de corticoides tópicos, en 5 estudios aleatorizados y controlados de su desarrollo clínico; de ellos, más de 800 pacientes fueron tratados durante al menos 1 año en 2 estudios. En general, la incidencia de eventos adversos relacionados con el fármaco es baja (se registró una incidencia similar con el uso de placebo: 14,2% vs. 12,8%); además, la mayoría fueron autolimitados y leves-moderados en severidad, de forma que la proporción media de pacientes que interrumpió el tratamiento por problemas de seguridad fue baja, del 2,3% durante el tratamiento inicial y del 1,5% con el mantenimiento (vs. 2,8% y 3,1% con placebo, respectivamente). Las reacciones adversas más frecuentemente notificadas con tralokinumab –respecto a placebo– fueron: infecciones –en su mayoría, víricas– del tracto respiratorio superior (23,4%, principalmente como resfriado común), reacciones en la zona de inyección como dolor y enrojecimiento (7,2% vs. 3% con placebo), conjuntivitis (5,4% vs. 1,9%), conjuntivitis alérgica (2,0%) y eosinofilia (1,3% vs. 0,3%). Las infecciones fueron graves en muy pocos casos (0,4% vs. 1,1%). La aparición de anticuerpos anti-fármaco –transitoria y de bajo título– se describió en menos del 5% de los pacientes tratados, y no parecen tener ninguna relevancia en la eficacia o seguridad clínicas. La seguridad de tralokinumab hasta un año de tratamiento fue similar a la observada hasta la semana 16 (EMA, 2021).

RkJQdWJsaXNoZXIy MTEwMTU=