Farmaceuticos459

Ni bajamos, ni bajaremos la guardia EDITORIAL L a actitud de la Profesión Farmacéutica ante la declaración del estado de alarma provocado por la aparición del SARS- CoV-2 y su respuesta para hacer frente a la pandemia ha sido ejemplar, proactiva y de gran altura profesional como sanitarios atendien- do a la población en primera línea asistencial. La Farmacia española ha sabido responder y ha demostrado una vez más su papel estratégico y clave en el Sistema Nacional de Salud. Una labor esencial como así queda reflejada en el informe de balance de actuaciones presentado por la Organización Farma- céutica Colegial con todas las iniciativas impulsadas desde que comenzó la crisis sanitaria. Un informe balance de actuaciones frente a la CO- VID-19, del que damos cuenta en las páginas interio- res de esta revista; y en el que se refleja cómo los farmacéuticos en todos sus ámbitos de ejercicio –industria, hospitales, atención primaria, farmacia comunitaria y en la salud pública– hemos sido cla- ves para poder superar y gestionar la pandemia. Esta crisis ha puesto a prueba la labor sanitaria y asistencial de toda la profesión farmacéutica y la fortaleza de la red de 22.071 farmacias. Una emergencia sanitaria sin precedentes en nuestra historia reciente que ha puesto en primer plano tres fortalezas: que el modelo español de farmacia ha sido y es estratégico en la respuesta sanitaria al coronavirus; que el farmacéutico es el profesional sanitario más accesible; y que ningún ciudadano se ha quedado sin acceso a su medicación. Sin embargo, la amenaza del coronavirus aún sigue presente en nuestras vidas. Ha terminado el periodo de estado de alarma decretado por el Gobierno, pero la situación de emergencia sanitaria continúa. Y los farmacéuticos no bajamos, ni bajaremos la guardia. De hecho, desde la Organización Farmacéutica Colegial hemos propuesto una serie de acciones de cara al nuevo escenario post pandemia. Una voz de la Profesión Farmacéutica que el pasado 8 de junio se escuchó en el Congreso de los Diputados, en el seno de la Comisión para la Reconstrucción Económica y Social. Unas propuestas de los farmacéuticos para el futuro del Sistema Nacional de Salud y la Salud Pública que fueron presentadas por el presidente del Consejo General de Colegios Farmacéuticos, Je- sús Aguilar, con un mensaje muy claro dirigido a los parlamentarios: “No se puede reconstruir el Sistema Sanitario ni la Salud Pública sin los farmacéuticos y sin la Farmacia”. Unas propuestas de la Profesión que se articulan en cuatro ejes y que responden a las necesidades reales de los pacientes. Propuestas que abogan por reafirmar a la Farmacia Comunitaria como la Far - macia de Atención Primaria para dar mayor capaci- dad asistencial al Sistema Sanitario; por una mayor integración de la Farmacia en las políticas de Salud Pública y en la transformación digital de la Sanidad; y por garantizar la viabilidad de las farmacias por su labor sanitaria, social y de cohesión territorial, en especial, aquellas situadas en zonas frágiles, despo- bladas y deprimidas. Los profesionales farmacéuticos solo hemos pedido una cosa durante la pandemia: protección. El resto de acciones han sido ofrecimientos y propuestas a colaborar para hacer frente al coronavirus, garanti- zar el acceso al medicamento y reducir el riesgo de contagio entre los más vulnerables. La lucha contra la COVID-19 no ha terminado. Los farmacéuticos no podemos, ni debemos, bajar la guardia. De hecho, estamos siempre de guardia. La Farmacia española ha demostrado una vez más su papel estratégico y clave en el Sistema Nacional de Salud” Los farmacéuticos no bajamos, ni bajaremos la guardia. De hecho, estamos siempre de guardia”

RkJQdWJsaXNoZXIy MTEwMTU=