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La Farmacia y el Paciente Crónico E

n España, hay cerca de 20 millones de per-sonas que padecen enfermedades cróni-cas, de las cuales, la mayoría son pacientes mayores de 50 años y polimedicados. Una población española cada vez más envejeci-da y caracterizada por el incremento en el número de pacientes crónicos. Se estima que, en 10 años, 1 de cada 5 españoles será mayor de 65 años, y con un coste sanitario por persona entre 4 y 12 veces superior al coste actual.

Diversos estudios apuntan además a que las enfermedades crónicas generan el 80% de las con-sultas de Atención Primaria y el 60% de los ingresos hospi-talarios. Estudios que ponen de relieve también que más de la mitad de los pacientes crónicos no cumplen con el tratamiento prescrito. Cifras e infor-mes que vienen a dibujar una nece-sidad ante la que se encuentra el Sistema Nacio-

nal de Salud de avanzar en su modelo

de asistencia sanitaria; evolucionando de una aten-ción centrada mayoritariamente en pacientes con enfermedades agudas a pacientes crónicos. Una evolución en las demandas y necesidades asisten-ciales de los pacientes que desde la Farmacia se viene constatando en su día a día en cuanto esta-blecimiento sanitario más cercano y accesible a la población.

En este contexto, el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad ha anunciado la puesta en marcha de una Estrategia para el Abordaje de los Pacientes Crónicos que dé respuesta a las necesidades sociosani-tarias de los pacientes. Una Estrategia basada en cua-tro pilares: prevención actuando sobre los factores de riesgo, promoción del paciente como centro del siste-ma, eliminación de compartimentos estancos con el fin de garantizar la continuidad asistencial, y promo-ción de la innovación y la investigación.

No en vano, según destacan desde el Ministerio de Sanidad, las enfermedades crónicas constituyen

la principal causa de muerte en el mundo. En Espa-ña, aproximadamente la mitad de las defunciones se debe a alguna de las cuatro enfermedades de tipo crónico más comunes: el cáncer, la enferme-dad isquémica del corazón, la enfermedad cardio-vascular y la diabetes mellitus.

En la atención a los pacientes crónicos, la Farma-cia viene desarrollando en el tiempo importantes programas que dan respuesta a las demandas espe-cíficas de estos pacientes. Pacientes que requieren una atención personalizada e individualizada en el uso de los medicamentos y demandan una corres-

ponsabilidad en los resultados en

salud de sus tratamientos.

El programa conSI-GUE, que evalúa el impacto del segui-miento farmaco-terapéutico en el paciente cró-nico y polime-dicado, el pro-yecto Azuaga de atención farma-céutica a pacien-tes dependientes, el programa ADCOM de mejora de adherencia al ancia-no polimedicado, el programa D-Valor o las más de 9 acciones del Plan Estratégico de Aten-ción Farmacéutica son sólo algunos de los muchos ejemplos e iniciativas impulsadas por la Farmacia y orientadas a dar respuesta a las necesidades asis-tenciales de los pacientes.

Iniciativas que contribuyen no sólo a mejorar la calidad de vida de los pacientes crónicos y polime-dicados, sino también a optimizar los recursos del Sistema Nacional de Salud. El 36% de las visitas a urgencias son consecuencia de resultados no desea-dos del medicamento, un 81% de los cuales son evitables a través del servicio de Seguimiento Far-macoterapéutico.

En definitiva, la red asistencial de farmacias des-empeña una labor esencial, en beneficio de los pacientes crónicos, en necesaria y estrecha cola-boración con el resto de los profesionales sanita-rios; garantizando así la continuidad asistencial del paciente, auténtico eje vertebrador del Siste-ma Sanitario. ✥

EDITORIAL

a red asistencial de farmacias desempeña una labor esencial, en beneficio de los pacientes crónicos, en necesaria y estrecha colaboración con el resto de los profesionales sanitarios;

garantizando así la continuidad asistencial del paciente, auténtico eje vertebrador del Sistema Sanitario